lunes, 29 de febrero de 2016

La butaca: "Deadpool"

Bueno, debo decir que "Deadpool" ha sido una concesión, pero cuando una queda para ir al cine no siempre puede elegir y salirse con la suya, así que a veces debemos ver películas que nosotras no hubiéramos elegido... Pero, en ocasiones cambiar de aires y dejarse llevar no está tan mal.

¿Qué decir de "Deadpool"? Pues bien, claramente es una película que se ha realizado con el objetivo de provocar y de reírse de sí misma. Ambientada en el mundo de los superhéroes pretende presentarnos precisamente al antihéroe, gamberro y canalla donde los haya. 

Empezando porque Wade Wilson es un mercenario que se dedica a ayudar a la gente que tiene problemas, por dinero, es verdad, y terminando porque cuando adquiere sus superpoderes huye de la responsabilidad que éstos le imponen y se deja guiar única y exclusivamente por sus intereses personales, todo lo que hace, absolutamente todo, lo hace por amor... Con lo que ¿estamos ante un antihéroe o no? Decididlo vosotros. Porque como el propio protagonista nos deja claro, esta no es una película de superhéroes, esto es una historia de amor, del amor entre Wade Wilson (Deadpool) y Vanessa.

Deadpool es, sin ninguna duda, el más irreverente, descarado y malhablado de los héroes de Marvel y Tim Miller ha decidido recoger este montón de basura y llevarlo a la pantalla convirtiéndolo en una auténtica sensación.

Empezando con sus créditos iniciales que no son para nada convencionales y en los que se refiere a él mismo como "paquete sobrevalorado" y siguiendo por el desarrollo de la acción. En un guión circular y con la escena inicial sirviendo de fondo a los créditos, "Deadpool" relata el nacimiento de este antihéroe y el origen de sus poderes.

De forma transgresora se dirige a los espectadores en todo momento, rompiendo la cuarta pared, y haciendo que la sala al completo interactúe con el protagonista, obligando al espectador a participar de la trama a cada paso de ésta. 

Con un humor sucio y en un lenguaje no apto para todos los públicos, "Deadpool" no será seguramente una gran película pero es, desde luego, una película que nos hará soltar más de una carcajada y que permitirá que los 106 minutos de su metraje se nos pasen volando.

Por supuesto, hablando de películas de superhéroes no podemos olvidar los efectos visuales y la fotografía que son realmente buenas y que contribuyen a hacer bastante creíbles hasta los momentos más escatológicos del film que, desde luego, los hay.

Así que sí, resulta que "Deadpool" es una opción digna si lo que buscamos es un rato de entretenimiento y una carcajada fácil aliñada por la Marvel.

Nos vemos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario